Berggasthaus Aescher, el hotel colgado de un precipicio

Hay veces en que un hotel no destaca tanto por el edificio o el servicio como por el entorno en que se encuentra. En ese sentido, el que te vamos a presentar a continuación resulta excepcionalmente llamativo e impresionante: Berggasthaus Aescher, el hotel colgado de un precipicio. Ahí tienes la foto como prueba irrefutable. Se trata de un establecimiento que parece haber sido colocado en un minúsculo saliente de ese farallón de granito de Säntis, en Appenzel (Alpes suizos), por un helicóptero. Sólo que eso es imposible por la sencilla razón de que lleva ciento setenta años en activo. Su nombre significa Casa de huéspedes de Aescher y funciona más bien como refugio de montaña, aunque de forma bastante más completa. Entre otras cosas porque se puede llegar hasta allí en coche en un par de horas desde Zurich, tomando luego el teleférico Ebenalp Gondola... o subiendo a pie para atravesar las Cuevas Wildkirchi. Una vez en su interior hay cuatro habitaciones con una decena de literas cada una, aunque ofrecen mantas para aquellos que no tengan bastante con el saco de dormir. El baño es compartido, con el agua procede directamente de la montaña. Y, por supuesto, sin TV ni Internet. Claro que nada de eso es imprescindible cuando se tienen las vistas panorámicas que ves en la foto. O un restaurante bastante frecuentado donde preparan exquisitos menús (aunque no muy variados por la dificultad de subir suministros hasta allá arriba); por eso no es raro que se reserve para eventos. Hablando de reservar, es necesario hacerlo con antelación si se tiene pensado pernoctar en el Berggashaus Aescher. Eso sí, teniendo en cuenta que únicamente abre entre mayo y noviembre porque el mal tiempo impide el acceso en invierno, ya que el hotel se encuentra a 1.454 metros de altitud. Huelga comentar que el principal atractivo de los alrededores es la naturaleza en múltiples facetas. Así, las rutas de senderismo y montaña descubren al visitante verdes prados, picos nevados y lagos glaciares, pero además están las citadas cuevas y un museo de la prehistoria.

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