Conservación de especies en un entorno único

Las Islas Medas son uno de los lugares más apasionantes desde el punto de vista ecológico que hay en España. En 1983 fue nombrado Reserva Natural Marina, lo que ha incrementado la cantidad de su fauna y flora notablemente, dejando clara la necesidad de la creación de más reservas marinas para la conservación de ciertos ecosistemas.

Las islas Medas pertenecen a la localidad de Torroella de Montgrí – L´Estartit, en plena Costa Brava, provincia de Gerona y aunque hoy no están habitadas, en otro tiempo fueron refugio para piratas y escala de muchos navíos griegos, y restos de naufragios así lo confirman.

Pertenecen al Parque Natural del Montgrí, las Islas Medes y el Bajo Ter. Son en total 7 pequeñas islas rocosas de gran atractivo para la práctica de submarinismo, entre otras cosas por sus cavidades interiores, en las que habitan muchas especies: algunas como el mero (con ejemplares de hasta 30 años) o el corvallo. Pero si alguna merece especial atención es el coral rojo. En las islas medas ha ido descendiendo notablemente esta especie hasta quedar peligrosamente reducida. El motivo es su utilización en la joyería, siendo el coral rojo muy apreciado, se pagan grandes cantidades por piezas hechas con él, lo que ha mermado su población después de muchos años sin protección y control. El propio paso de los buzos en las cuevas también ha deteriorado las colonias de corales rojos, por lo que conviene un mayor control de este lugar.

Desde la costa, de la que se encuentra aproximadamente a un kilómetro, se organizan visitas a las islas Medas por lo que es posible disfrutarlas, respetando por supuesto el entorno, especialmente quienes se decidan a practicar submarinismo entre sus muchas cuevas.