A veces hay establecimientos que ofrecen tres en un uno. Algo que suele circunscribirse a esa modalidad que ya hemos visto aquí y se denomina hoteles boutique, y que muy bien podría quedar representado por
La Casa del Convento, un encantador lugar que es, al mismo tiempo, hotel, spa y restaurante, y tiene una catalogación rural de 3 hojas.
Está situado en la localidad de
Chinchón, a 45 kilómetros al sureste de Madrid, declarada
Conjunto Histórico Artístico en 1979. Muy cerca de su Plaza Mayor y del parador local, se ubica en la antigua
posada de la fruta, un edificio del siglo XVIII del que se dice que estuvo habitado por Lope de Vega y que fue rehabilitado en 2009 siguiendo como modelo la arquitectura típica del pueblo. Un sitio tranquilo, acogedor y familiar que resulta perfecto para desconectar de la vida cotidiana y tener una estancia de
relax total.
Y no lo decimos porque sí, ya que
La Casa del Convento ofrece a su clientela una serie de
tratamientos de inspiración oriental para atajar el estrés y los problemas físicos o psicológicos. Que nadie piense en un macrospa tipo
resort, pues está adaptado al tamaño del
hotel y éste dispone sólo de
5 habitaciones; eso sí, bastante amplias (las denominadas
Nuestra Señora de la Misericordia y
Nuestra Señora de la Asunción disponen de alcoba y salón) y dotadas de aire acondicionado, baño con bañera de hidromasaje, TV, caja fuerte, minibar y Wi-Fi gratuito.
Equipamiento que se completa con
servicios como lavandería, biblioteca con internet, prensa diaria, sala de reuniones, juegos de mesa,
baby sitter, párking concertado, bar y un
restaurante situado en un patio climatizado y con capacidad para 30 comensales que, además de los desayunos, ofrece cocina tradicional castellana (hay menú degustación) y una selección de vinos conservados en una bodega.
Spa y tratamientos
Pero volvamos al asunto del
spa. Se trata de una terma romana que incluye piscina climatizada,
jacuzzi, cama de burbujas, pediluvio y diversas duchas de tratamiento. También bañera de hidromasaje y el equipo
Aquafly, único en la Comunidad de Madrid. Al cliente se le facilitan albornoz, zapatillas y gorro de baño para disfrutar de una serie de tratamientos de los que no hay que olvidar los rayos UVA o los masajes terapéuticos que antes mencionábamos.
Abundando en el tema. añadir que a esos
tratamientos del spa, a saber, chocolaterapia, vinoterapia, olivoterapia, cerezaterapia y similares, deben sumarse un par de salas extra: la de relax a base de
cromoterapia y la
Zen para practicar Taichi, Pilates y Chikung.
Incluso, y aquí ya cambiamos de tercio, se puede celebrar la
boda en La casa del convento, siempre que el banquete no supere el medio centenar de comensales; ofrecen un paquete especial y el maquillaje de la novia y sus acompañantes.