Compartir:
BlogHalconViajes-Un crucero fluvial por el Volga Rusia es un país enorme que te requerirá varias visitas para conocerlo mínimamente. Sus referencias turísticas obvias son Moscú y San Petersburgo, que puedes visitar sucesivamente de una forma muy especial: recorriendo la distancia entre ambas mediante un crucero fluvial por el Volga, el río más largo de Europa. En efecto, al igual que la mejor manera de descubrir Egipto es en crucero por el Nilo, también las enormes distancias rusas se amoldan a ese tipo de navegación: lenta, relajada, tranquila y con posibilidad de hacer numerosas visitas durante el trayecto. Y lo puedes hacer en ambas direcciones. Lo normal es empezar en cualquiera de ellas haciendo el típico city tour para luego embarcar y lanzarse así a ese viaje tan especial. Si se parte de Moscú, por ejemplo, la primera escala seguramente será Uglich, ciudad integrante del llamado Anillo de oro (urbes principales del país, alrededor de la capital) y cuyo atractivo turístico más destacado es la iglesia de San Dimitri Ensangrentado (en recuerdo de la violenta y misteriosa muerte del zarévich en 1591). Otras paradas serían Yaroslavl, donde se puede ver el templo de San Nicolás y la antigua Casa del Gobernador (hoy galería de arte) y Goritsy, de la que es recomendable el monasterio de San Cirilo, el más grande y añejo de Rusia (siglo XIV), y situado junto a un bello paisaje de bosques y lago. Otra etapa es la que permite visitar Kizhi, una isla del lago Onega que acoge una pintoresca aldea de madera. Auténtico museo arquitectónico al aire libre, forma parte del Patrimonio de la Humanidad. De hecho, la arquitectura en ese material es tradicional en la zona porque luego pasará aMandroga, otro pueblo de características similares que además añade al interés un curioso Museo del Vodka y espectáculos folklóricos. Por último, tras navegar por el imponente lago Ladoga, escenario de cruentas batallas en la II Guerra Mundial, llegarás a San Petersburgo. Su casco histórico también está protegido por la UNESCO y el antiguo Palacio de Invierno de los zares es ahora la sede del sensacional Museo del Hermitage. Este itinerario puede tener ligeras variaciones según la compañía que contrates, pero todas te ofrecerán camarote en una motonave con diversos servicios (restaurante, piscina, sauna, solárium, conciertos, cena con el capitán, guía...).
Anterior Diez formas de celebrar la Navidad alrededor del mundo
Siguiente Un paseo por Florencia

Categorías

Artículos relacionados