Las experiencias en cada puerto van a ser inolvidables. Y es que además de disfrutar de las actividades y comodidades que te ofrece el crucero y su tripulación durante los días de navegación, las paradas en los puertos más interesantes van a ser parte de la aventura. Ciudades monumentales, repletas de vida y patrimonio te darán la bienvenida.
La catedral de Nidaros es una joya arquitectónica muy interesante con un curioso estilo gótico. Los orígenes del edificio se remontan al siglo XII. Posee una planta en forma de cruz latina formada por una nave central y dos laterales. Asimismo, en el crucero se encuentra una torre en forma de aguja mientras que, en la fachada occidental, se encuentran dos torres de menor tamaño. Entre otras cosas, su interior alberga un octógono con el altar mayor, el coro, la Capilla de la Virgen María, dos órganos de gran valor histórico, columnas, arcos y ventanas.
Situado justo al sur de la catedral, se encuentra el Palacio del Arzobispo. Construido durante el siglo XII, este conjunto de edificios de arquitectura románica fue la residencia del arzobispo hasta el año 1537. Es la construcción profana de piedra más antigua de los países nórdicos. Actualmente, el palacio alberga colecciones arqueológicas, esculturas románicas y góticas de la catedral, mobiliario barroco y neoclásico, un museo de historia militar y la sala de las regalías con las joyas de la corona.
Bakklandet es un coqueto barrio en el que disfrutar de un fantástico paseo por estrechas callejuelas empedradas rodeado de coloridas casetas de madera. Además, por la zona hay varios bares, cafeterías y tiendas con producto local. Por otra parte, también destaca el famoso Gamle Bybro, conocido como el Puente Viejo, un precioso puente de aires bohemios que cruza el río Nidelva. Y es que el barrio de Bakklandet es una auténtica maravilla con mucho que ofrecer.