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[caption id="attachment_41991" align="aligncenter" width="625"]gamla_stan Gamla Stan desde el MIrador de Skinnarviksberget[/caption] La ciudad de Estocolmo tiene la peculiaridad de estar distribuida a lo largo de 14 islas. La más céntrica y primera en ser fundada es Stadsholmen, sitio donde se encuentra Gamla Stan (la Ciudad Vieja), un encantador conjunto de calles medievales, llena de edificios históricos y monumentos de gran belleza, como la Catedral de Estocolmo, el Museo Nobel o el Palacio Real. Para admirar el perfil urbano del casco antiguo, es necesario alejarse un poco hacia la vecina isla de Södermalm, y visitar el único mirador natural de Estocolmo, en la colina de Skinnarviksberget, un sitio especial, tranquilo y poco conocido que ofrece una de las mejores vistas a Gamla Stan y la silueta urbana de Estocolmo. Hacia el siglo 17, Södermalm era un área de Estocolmo netamente rural y dedicada a la agricultura, que se terminó integrando en la ciudad como un barrio de clase trabajadora. En la actualidad, Södermalm es un distrito bastante alternativo y bohemio, donde se han llegado a instalar una buena cantidad de emprendedores que le han dado una nueva vida y lo han convertido en una de las áreas más interesantes y demandadas de la ciudad, aún alejada de los grandes circuitos turísticos y los destinos de vacaciones. Estas colinas, apostadas a la orilla de la bahía de Riddarfjärden, son un mirador natural hacia Gamla Stan, el báltico y otras islas del archipiélago, regalando al visitante vistas que no tendrá en ninguna otra parte de la ciudad, si el buen tiempo lo permite, claro está. Llegar hasta Södermalm es sumamente fácil en transporte público, aunque las colinas se hallan un poco escondidas. Lo primero es llegar hasta la estación de metro Zinkensdamm, a tan sólo 4 estaciones del metro de Gamla Stan, y una vez allí es muy poco lo que hay que caminar. Al subir a nivel de calle, hay que asegurarse de salir por la calle Ringvägen y comenzar a subir hasta encontraros con el parque Skinnarviksparken. Una vez lleguéis a un claro de césped, debeis coger un pequeño sendero boscoso en dirección ascendente y hacia la costa y en menos de 5 minutos habréis llegado a estas escondidas colinas rocosas. Una vez arriba, encontrareis un rincón escondido de Estocolmo, frecuentado por bastante gente joven, que acude a Skinnarviksberget es busca de un sitio tranquilo para pasar la tarde con los amigos o la pareja. Cuando comprobéis las vistas entenderéis porque es un lugar tan especial. Os recomiendo hacer un paseo por el barrio de Södermalm, en especial por las calles  Södermannagatan, Nytorget y Svartensgatan, donde se encuentra el epicentro cultural y comercial de una de las zonas de Estocolmo que aún no han sido descubiertas por el turismo.  

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