Atracciones de época en Disneyland® Paris

Si eres un nostálgico de los tiempos pasados, tienes un motivo más para amar Disneyland® Paris. Y es que, entre sus muchas características, el Parque Disneyland está lleno de detalles y atracciones de época que te harán sentir como si hubieses retrocedido varias décadas: un viaje al pasado que podrás saborear mientras paseas por sus zonas mágicas de atracción en atracción. Nada más entrar por la puerta del Parque te encontrarás en Main Street, U.S.A. Como ya te hemos contado, esta calle está inspirada en el ambiente de un pequeño pueblo del año 1900, con tantos detalles que creerás encontrarte en el escenario de una película. Si quieres darte a ti mismo un toque vintage para meterte en el papel de un habitante de finales del siglo XIX o principios del XX, pásate por la peluquería Dapper Dan’s Hair Cuts y pide un corte de pelo al estilo de los años dorados. ¿Te gusta tu nuevo look? También en Main Street U.S.A tendrás la oportunidad de experimentar la vida de aquella época subiéndote, por ejemplo, en alguno de los coches de Main Street Vehicles. Limusinas, coches de policía o bomberos... Tienes para elegir, y si lo prefieres, también puedes montar en los tranvías tirados por caballos que recorren la calle en ambas direcciones. ¡A los niños les encantará! Para las largas distancias dentro del Parque, nada mejor que el tren de vapor, con estaciones en cada una de las tierras mágicas, donde también encontrarás muchos detalles para sentirte en otra época. Fantasyland, por ejemplo, tiene más tintes medievales, pero los tiovivos como Le Carrousel de Lancelot son intemporales. Cuando llegues a Frontierland no dejes de subir a bordo Mark Twain o el Molly Brown: dos barcos de vapor de palas que te transportarán a un mundo de leyendas como si estuvieras surcando el mismísimo Mississipi. Admirar las vistas desde cubierta es una experiencia romántica que nunca olvidarás. Por último no hay que olvidar que también en aquellos años se soñaba con los tiempos venideros. Descubrir la idea que en aquella época se tenía del futuro es cuanto menos curioso; para ello desplázate a Discoveryland, donde encontrarás un homenaje a los grandes visionarios de la historia: desde Julio Verne y su submarino Nautilus hasta la posibilidad de pilotar un cohete espacial, tal como se imaginaba que eran a finales del siglo XIX, en la divertida atracción Orbitron. Después de este paseo, ¿eres de los que piensa que cualquier tiempo pasado fue mejor?

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