En otoño, la tierra se despereza y de sus agostados suelos empieza a brotar de nuevo una vida fresca y llena de colores. Los árboles se desnudan para  sobrevivir al invierno mientras que nosotros, al contrario, nos vamos abrigando. Los parques del mundo se cargan de magia y no debes perderte este momento maravilloso y efímero en el que la naturaleza se transforma.

6 parques del mundo donde el otoño te dejará sobrecogido

La Granja de San Ildefonso (Segovia)

Antigua residencia veraniega de la realeza española (realizado a imagen y semejanza del Palacio de Versailles), el Palacio Real de La Granja de San Ildefonso se alza dentro un parque monumental y lleno de belleza. Sus múltiples fuentes y esculturas enmarcadas con el dorado de los árboles caducos, dotan de una decadente y señorial melancolía a este magnífico parque ajardinado.

Bushy Park (Londres)

Es uno de los parques más conocidos de Londres, y además, uno de los más grandes gracias a sus 445 hectáreas. Ubicado sobre el Hampton Court Palace, se caracteriza por su espíritu bucólico y pastoril. No es raro ver venados en libertad recorriendo el parque.

Parque de Vigeland (Noruega)

La realización y diseño del  parque más conocido de Noruega fue encargado por el ayuntamiento entre 1907 y 1942 al escultor Gustav Vigeland. 32 hectáreas  de un magnífico y arbolado parque lleno de poderosas esculturas que hablan de las diferentes etapas y emociones del ser humano. Descubrir estas impactantes esculturas como puede ser el “Monolito” de 17 metros de altura entre los dorados otoñales puede ser una experiencia inolvidable.

Boston Common y Public Garden (EE.UU.)

El otoño ama a  la costa este de EEUU, por lo que visitar Boston en esta época es muy acertado. En la ciudad se encuentran estos dos parques inseparables, ubicados de manera colindante. La laguna del Public Garden y el estanque “Frog pond” del Common tienden a congelarse cuando el otoño se acerca a su fin. Disfrutar del otoño patinando sobre el hielo puede ser memorable.

Parc du Mont-Royal (Canadá)

El monte de Canadá en el que se ubica este enorme parque es el que inspiró el nombre de la propia ciudad de Montreal, situada en Quebec. Es maravilloso perderse en bicicleta por sus 200 hectáreas visitando la cruz que corona la cumbre, parando a admirar la ciudad desde la distancia en el mirador de Kondiaronk Belvedere y ver el reflejo de las diferentes gamas rojizas de los árboles en el lago de los castores.

Parque Nara (Japón)

La Ciudad de Nara, cerca de Kioto, es muy famosa por sus jardines y parques.  Merece la pena acercarse temprano en otoño, ya que es un parque muy popular. Uno de sus mayores atractivos, además de la belleza de su flora, es que este parque está habitado por cientos de ciervos (mensajeros de Dios según las creencias religiosas sintoístas) que viven en libertad y cuyo carácter amigable permite interactuar con ellos. Este es un parque cargado de espiritualidad  y se encuentra salpicado de templos y santuarios. Una enorme escultura de Buda se encuentra en el interior del templo Tōdai-ji, siendo este considerado el edificio de madera más grande del mundo.